En un cuenco troceamos el chocolate blanco y lo derretimos en el microondas poco a poco (ya sabéis, calentando 10 sg y moviéndolo, luego otra vez al microondas... hasta que esté completamente fundido).
Lo mezclamos con la leche y el huevo en una cazuela, y lo calentamos a fuego bajo durante 10 min sin que llegue a hervir (muy importante, ir apartando del fuego cuando veamos que va a empezar a hacerlo).
Pasado este tiempo añadimos el azúcar invertido y la nata montada previamente, y lo batimos todo con la batidora.
Dejamos la mezcla enfriar en la nevera aproximadamente 1 h.
Ponemos en marcha la heladera (seguir las instrucciones del fabricante, en nuestro caso el recipiente tenía que dejarse 24 h antes en el congelador) y vamos vertiendo la mezcla de helado de chocolate blanco por el bocal.
Dejamos trabajar la heladora aproximadamente unos 30-45 min, hasta conseguir un helado de chocolate blanco cremoso y suave.
Un poco antes de pararla, machacamos la mitad de los Conguitos y los metemos en la heladera para que se integren con el chocolate.
Pasamos el helado de chocolate blanco y Conguitos a un recipiente hermético, y lo dejamos en el congelador para que acabe de enfriarse durante un par de horas antes de poder servirlo.
Si no tenéis heladera no os preocupéis que podréis hacerlo igualmente. Metedlo 4 horas en el congelador batiéndolo con varillas cada 30min para ir rompiendo los cristales que se vayan creando.
A la hora de servir, lo decoramos con el resto de los conguitos y a disfrutar del verano!!! La receta de helado de chocolate blanco nos ha encantado y volveremos a hacerla muchas veces!